Al parecer, los primeros registros del
combinado conjuntivo and/or datan de mediados del siglo xix y proceden del mundo de la abogacía
anglosajón, desde donde saltó al ámbito de los negocios y a la escritura en
general en el siglo xx. Fue tanto
su éxito que de inmediato se calcó la fórmula en francés (et/ou, parece
que desde Canadá), en español (y/o) o en italiano (e/o), por
citar solo tres lenguas romances. Su uso se defendía como la fórmula más breve
para indicar que dos opciones pueden tomarse en conjunto o como alternativas: Consider
whether the students will be able to read and/or understand the book. Considera
si el alumnado será capaz de leer y/o entender el libro.
Sin embargo, desde el comienzo esta
extraña pareja conjuntiva se topó con detractores. No hay manual de estilo de
ninguna de las lenguas citadas que la respalde. «Avoid this Janus-faced term. It can often be replaced by and or or
with no loss in meaning. Where it seems needed […] try or […] or
both», advierte, por ejemplo, el Chicago
Manual of Style (2010: 266), mientras que en Rédaction et interprétation
des lois, L. P. Pigeon sentencia: «Et/ou est tout simplement
inadmissible. […]
L’utilisation de cette conjunction, qui n’en est pas une, est une chose que
répugne au génie de la langue, aussi bien en anglais qu’en français» (1965:28).
La Fundéu, siguiendo el criterio del Diccionario panhispánico de dudas académico,
desaconseja el uso en español del calco y/o por innecesario, puesto
que la conjunción o no es excluyente, salvo que resulte imprescindible
para evitar la ambigüedad en escritos muy técnicos.
¿Existirán esos escritos tan técnicos
donde el uso de la pareja unida por la barra se vuelva imperativo? Tal vez sean
como las meigas… Confieso que no he sido capaz de encontrar ningún ejemplo que
aportar.
En mi experiencia, el uso y abuso
de y/o es un claro síntoma de escritura vacua y perezosa. Carece de
sentido. Bajo su aire de autoridad pedante se oculta un mero desconocimiento de
la lengua. Volvamos al ejemplo citado arriba en inglés y español: Considera
si el alumnado será capaz de leer y/o entender el libro. En este caso, la
conjunción que debería escribirse es y, puesto que una lectura sin
comprensión es inútil, y sería imposible entender si no se lee. Recordemos, además, que en español (y también en inglés) la conjunción o no es
excluyente, sino que expresa adición o alternativa. Por tanto, también podría
escribirse: Considera si el alumnado será capaz de leer o entender el texto,
lo que significa leer, entender o ambas cosas a la vez. Es el contexto
el que proporciona la clave del sentido.
Pero cuando no nos fiamos del contexto, la lengua nos ofrece suficientes
recursos para darnos a entender con precisión. Tomemos el siguiente ejemplo: La utilización de textos copiados sin citar
la procedencia demuestra que quien escribe es descuidado y/o deshonesto. Si
se desea recalcar el valor excluyente de la conjunción o, no hay más que
repetirla ante cada una de las alternativas: El
empleo de textos copiados sin citar la procedencia demuestra que quien escribe o
es descuidado o es deshonesto. Eligiendo la simple conjunción y se
enuncia sin ambages la adición de descuido a deshonestidad: El empleo de textos
copiados sin citar la procedencia demuestra que quien escribe es descuidado y deshonesto.
Y aún cabe otra posibilidad, si lo que se desea es hacer hincapié en que
ambas alternativas son posibles: El empleo de textos copiados sin citar la
procedencia demuestra que quien escribe es descuidado, deshonesto o ambas cosas.
Una antigua amiga editora de la que aprendí muchísimo nos aconsejaba
siempre ayudar a los autores a librarse de esta dañina «conjuntivitis»
para mejorar su visión de la escritura. Y no es tarea difícil. Basta con detenerse
a pensar en lo que se quiere expresar para evitar (corregir) redacciones tan desacertadas como las siguientes: Podrán
enviar la respuesta vía correo electrónico y/o fax. Los invitados llegaron a la
reunión en autocar y/o limusina. Las candidatas deben acreditar su dominio de
inglés y/o alemán. Al cruzar el desierto, los más débiles murieron de hambre y/o
sed. Este mensaje y/o archivos adjuntos son confidenciales. Ni se simplifican
los textos ni son más cortos mediante el uso mimético de y/o.
Una última advertencia: en el caso de que se encuentre y/o en
un contexto muy técnico de una disciplina en la que resulte imprescindible su
uso, ha de tenerse en cuenta que si la palabra siguiente comienza por o u ho,
se escribirá y/u.
La lengua destrabada
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Primero: Gracias por compartir.
ResponderEliminarSegundo: Interesante dato. En mi práctica de escritura he tratado de no usar esta fórmula, aunque sí me lo he topado en textos técnicos. Siento que tanto el uso de la "y" como de la "o" nos conducen a dos usos distintos, y que el uso de ambos conlleva a ambigüedad.
Gracias por invitarnos a la reflexión.
Gracias a ti. Un cordial saludo.
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